En medio de una caravana en Lomas de Zamora, el presidente Javier Milei habló por primera vez sobre los audios que lo involucran en un presunto esquema de coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), a través de su hermana Karina Milei. El mandatario negó su veracidad y acusó a su exabogado, Diego Spagnuolo, de mentir.
“Todo lo que dice (Diego Spagnuolo) es mentira. Lo vamos a llevar a la justicia y vamos a probar que mintió”, expresó el jefe de Estado en diálogo con la prensa durante la actividad proselitista.
La jornada estuvo marcada por incidentes cuando un grupo de personas arrojó piedras y botellas contra la camioneta en la que Milei recorría la zona junto a su hermana, el diputado José Luis Espert y el referente libertario en Buenos Aires, Sebastián Pareja.
Más tarde, ya desde la residencia de Olivos, el presidente utilizó sus redes sociales para responsabilizar a militantes kirchneristas por las agresiones, a quienes acusó de recurrir a la violencia “por carecer de ideas”. Además, renovó su llamado a votar en las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre y en las nacionales del 26 de octubre bajo la consigna de su campaña: “kirchnerismo nunca más”.
La respuesta oficial en el Congreso
Paralelamente, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, denunció en su informe ante la Cámara de Diputados de la Nación Argentina que detrás de la difusión de los audios se montó “una operación política”.
El funcionario defendió al Gobierno frente a las acusaciones de corrupción y a los cuestionamientos por la falta de controles en el caso del fentanilo contaminado. “Vamos a responder estas maniobras con transparencia y respetando la división de poderes”, afirmó.
Francos sostuvo que el episodio coincidió con la sanción en el Congreso de una Ley de Emergencia en Discapacidad que compromete recursos que el Estado “hoy no dispone”. En ese marco, aseguró: “Me comprometo a, si alguna vez alguien me lo pide, brindar mi celular, dar las claves, dar mi computadora, no tengo ningún inconveniente con eso”.
