Tras una reunión en el Congreso, la ministra de Seguridad y senadora electa Patricia Bullrich aseguró que quedaron en evidencia diferencias con la vicepresidenta Victoria Villarruel acerca de la estrategia legislativa del oficialismo en la Cámara alta. El encuentro se produjo luego de semanas de tensiones públicas y en la antesala del debate parlamentario de los proyectos centrales impulsados por el Gobierno.
Cruces por el rol de la vicepresidencia en el Senado
En declaraciones a LN+, Bullrich afirmó que la reunión reveló discrepancias sobre “cómo encarar el futuro” en la Cámara alta. Según la futura jefa del interbloque oficialista, Villarruel “se ubica como presidenta del cuerpo sin tomar partido”, postura que —según expresó— debería revisarse para facilitar la agenda legislativa del Ejecutivo.
“El objetivo que voy a buscar, junto con todo nuestro bloque, es que la vicepresidenta, sin violar el reglamento porque no hace falta, ayude a impulsar las iniciativas que el Gobierno necesita para que la Argentina crezca”, sostuvo.
Bullrich señaló que la administración Milei deberá construir mayorías para aprobar los proyectos clave y destacó como prioridades seguridad, orden, economía y el paquete de leyes estructurales. También afirmó que trabajará para reunir los votos necesarios en cada debate legislativo.
Pese a las diferencias, Villarruel buscó enviar una señal de armonía al término del encuentro: “Conversamos y nos pusimos de acuerdo para lo que viene”, dijo en un mensaje conciliador.
Bullrich, por su parte, aseguró que planea instalar un clima de trabajo “cómodo y abierto” para todos los senadores y enfatizó que su propósito no es cuestionar la representatividad de ningún legislador.
“Mi despacho estará abierto para colaborar en todo lo que haga falta”, remarcó.
Bullrich denunció penalmente al titular de ATE
Paralelamente, Bullrich presentó una denuncia penal contra el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, al acusarlo de “amenaza contra el orden constitucional y la vida democrática”. La presentación surgió tras declaraciones del sindicalista, quien afirmó que su rol es “provocar la crisis de este Gobierno” frente al eventual envío de una reforma laboral al Congreso.
La denuncia fue realizada ante la Justicia Federal por Fernando Soto, director nacional de Normativa y Relaciones con los Poderes Judiciales y los Ministerios Públicos del Ministerio de Seguridad. Según el texto judicial, Aguiar habría emitido una “amenaza pública de atentar para provocar la crisis del Gobierno Nacional”.
Aguiar respondió públicamente y negó las acusaciones:
“Está viendo a sus propios fantasmas que la persiguen”, expresó al rechazar la denuncia.
Clima político en la antesala del debate parlamentario
Los dos frentes abiertos de Bullrich —la interna por la coordinación legislativa y el conflicto con ATE— se producen mientras el Gobierno se prepara para enviar al Congreso un paquete de reformas considerado esencial por el Poder Ejecutivo. El resultado de las negociaciones internas y externas será clave para asegurar mayorías en la Cámara alta y avanzar con las iniciativas económicas y estructurales que el oficialismo considera prioritarias.
